Mi corillo celestial está compuesto por Dios, María y las tres T; Santa Teresita del Niño Jesús, Santa Teresa de Ávila y Santa Teresa de Calcuta. Cuando necesito mucha intercesión y ayuda de ellos, yo los convoco a un timbac y pedimos por esa intención. ¿Tienes un corillo celestial?

Pues te cuento sobre una de las del corillo: Santa Teresa de Ávila. Ella era una monja carmelita, española. Después de casi veinte años como religiosa, ella tuvo una conversión y desde ese momento en adelante, su vida nunca más fue igual. Algo similar me pasó a mí. Católica de cuna (con excepción de unos años en que mi madre optó por llevarnos a una iglesia protestante), yo también tuve una conversión que marcó mi vida para siempre. Si no has leido mi testimonio de fe, HAZ CLIC AQUÍ para que lo leas.

Pues basándose en la conversión de Santa Teresa de Ávila, los amigo en Catholic-Link han escrito un artículo sobre la conversión que yo encuentro perfecto. Y ¿para qué crear lo que ya está creado? HAZ CLIC AQUÍ y te dirijo a ese artículo.

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